¿Por qué en otros países no hay persianas?

persianas

Tener persianas en casa en España es algo completamente normal, de hecho, se espera que las casas tengan persianas. En cambio, en otro países no existen y utilizan solo cortinas para tapar la luz.

Origen

Haciendo una búsqueda en Google, encontramos que el término persiana viene del latín “persa,-ae”, que significa “originario de Persia”. Parece ser que la persiana, como tal, llegó por primera vez a Europa en el siglo XVIII, a Venecia concretamente.

Pero realmente el primero que patentó este sistema fue el físico inglés Edward Bevan en 1769. Inventó un artilugio de láminas móviles de madera que se podía accionar a través de un cordón y una polea encajados en un marco. No poco curioso que fuera un inglés quién inventó la persiana cuando en los países nórdicos, Países Bajos, Bélgica, Alemania, etc. no se utilizan. La razones son dos. Por un lado, allí tienden a atrapar el poco sol que les llega cuando aquí necesitamos evitarlo para no sobrecalentar los edificios. Por otro lado, las corrientes protestantes que se instalaron en esas zonas de Europa cambiaron la concepción de privacidad y ocultarte tras una persiana podría dar a entender que escondías algo.

Las persianas en España

Finalmente, las persianas se volvieron parte de la edificación en España. Tanto es así, que incluso tenemos diversidad de persianas. Las hay con muchísimo encanto, como la de esparto que pueden verse en multitud de pueblos andaluces o de Extremadura. También están las horizontales, sus láminas cuelgan como cortinas, la romana, los estores o los paneles japoneses, que se pueden instalar en grandes ventanales o puertas correderas gracias a su sistema de raíles.

Las persianas enrollables son el sistema más extendido en España y la verdad es que son un excelente sistema de control lumínico, sirven de protección solar y pueden mejorar la protección de la vivienda con ciertos sistemas de seguridad autobloqueantes. Pero también tienen varios inconvenientes, como por ejemplo que son un punto débil de la envolvente térmica entre otras razones por las que en otros países no se utiliza este sistema.

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